Demasiado trabajo, demasiados objetos, demasiados compromisos, demasiado de todo que poco o nada nos aporta. En la búsqueda del equilibrio vale la pena apuntarse al minimalismo emocional. “Tenemos menos riqueza de pensamiento, menos perspectiva…..” comenta el coach Juan Carlos Alvarez Campillo en este reportaje de la revista Psychologies.